El 21 de septiembre, Día Internacional de la Paz, nos sentamos en silencio en las escaleras de la Plaza de la Virgen.
Un gesto sencillo, pero lleno de significado.
Un encuentro de unión, respeto y amor hacia la Paz en el mundo.
Gracias de corazón a todas las personas que os sumasteis a este momento de conciencia, porque cada acto de paz, por pequeño que sea, suma.
Seguimos sembrando juntos/as un mundo más pacífico.




